sábado, 13 de febrero de 2016

[Kuroshitsuji] Bloody Love

Ninguno pensó que esto pasaría, un Shinigami y un demonio, juntos por una noche y todo empezó desde temprano, el mayordomo estaba vagando por las calles de Inglaterra porque su amo estaba en una reunión con su majestad y el junto con los mayordomos de la reina fueron sacados de la sala, pero aun así, Sebastián estaba preparado para cuando su amo lo llamara, pero él no era el único vago, el Shinigami de cabellos rojos estaba vagando por la misma calle, pero en sentido contrario. Ambos cruzaron las miradas y se acercaron poco a poco, pero cuando estuvieron frente a frente, Grell se desvaneció en los brazos de Sebastián, el principio el mayordomo creyó que estaba fingiendo, pero cuando toco su rostro para levantarlo y alejarlo, estaba hirviendo, era raro, ya que los shinigamis son mas fríos que un muerto. El mayordomo no sabia si dejarlo ahí o llevárselo con el, sabia que cualquier opción era mala, ya que dejarlo abandonado podría causarle mas problemas, pero llevárselos a la mansión y que el amo lo descubriera era posiblemente otro problema, pero no importo, tomo al Shinigami entre sus brazos y lo llevo cuidadosamente a la mansión phantomhive que se encontraba en la cuidad, como estaba vacía, entro directamente al cuarto de huéspedes, donde lo puso sobre la cama, le quito la gabardina roja, los zapatos y los lentes, además de que le soltó el moño del cuello para poder abrirle un poco la camisa, pero se la abrió lo suficiente como para ver su pecho, el cual era blanco, a diferencia de su rostro, su pecho era pálido, como el de un cuerpo muerto, pero, estaba caliente.

Reboot

- Tu ya no me amas - dijo Yuki, terminando aquel beso, agacho la mirada haciendo que su fleco le tapara los ojos. Masashi puso su mano en su barbilla y levanto su cara, leves lagrimas salían de los ojos del menor, al verlas se sintió la peor persona del mundo.
-No digas eso por favor - respondió Masashi acercándose a  el para besarlo de nuevo pero Yuki movió su cabeza para evitarlo.
- Basta Masashi, ya no quiero que finjas amor conmigo ya...- un fuerte abrazo lo interrumpió, los brazos de Masashi los mantenían tan cerca que no podía hablar y mucho menos responder al abrazo ya que sus brazos estaban a sus lados. Escucho como Masashi empezaba a llorar y el en automático comenzó a llorar igual.